Objetivos

Los objetivos de F.A.S.A.L ÁVILA son lograr una reducción en los costes y obtener nuevas formas de financiación para las asociaciones que la componen, distribuir información de subvenciones y convocatorias, prestar apoyo en actos de solidaridad y, debido a que su ámbito es provincial, ejercer como interlocutor ante organismos y entidades.

La filosofía a seguir está basada en los denominadores comunes. O lo que es lo mismo, si las actividades organizadas por las distintas asociaciones son similares, se pueden obtener recortes en los presupuestos a través de proveedores únicos.

Una de las formas más corrientes de financiación para las asociaciones, es la venta de participaciones de lotería en Navidad. Hay asociaciones que venden un número completo de lotería y a cambio consiguen que el lotero les regale uno o dos trofeos para sus campeonatos, esto representa un máximo de 90€, otros loteros financian el coste de imprenta para las participaciones, lo cual conlleva un coste máximo de 150€. Si varias asociaciones hacen un pedido único de lotería pueden obtener un descuento mínimo del 1%, lo cual representa en torno a las 300€ por número solicitado.

Este es un ejemplo de proveedor único, o central de compras y pedidos, que puede ser trasladado a la contratación de artistas para festejos, profesores para talleres, compra de objetos de merchandising, tales como camisetas, mecheros, etc.

LAS NUEVAS FORMAS DE FINANCIACIÓN

Como en el caso de la reducción de costes, la unión puede proporcionarnos nuevas fuentes de ingresos.

En este caso, el ejemplo más común es la tarjeta de crédito. La mayoría de la población tiene al menos una, “el dinero plástico” es, probablemente, la forma de pago con mayor futuro.

Esto es algo que no ha pasado desapercibido para clubes deportivos, grandes empresas y organizaciones. Los primeros tienen a su favor la pasión del ser humano y los segundos los intereses económicos del descuento o reversión hacia el usuario.

Un mínimo de usuarios es lo primero que cualquier entidad financiera exige a la hora de emitir una tarjeta de crédito para una organización. Este mínimo no lo suelen alcanzar las asociaciones sin ánimo de lucro, salvo Greenpeace y contados casos.

F.A.S.A.L ÁVILA sí puede reunir ese mínimo, además cuenta con un potencial de crecimiento equivalente a diez veces la población de la provincia de Ávila. Por un lado, los integrantes de sus asociaciones poseen la pasión incondicional que proporciona la raíz de sus orígenes, y por otro, los socios son conscientes de que cualquier ingreso en las arcas de su asociación revierte en sus intereses económicos, a través de la calidad de vida que es mejorada por la propia asociación.